2021-07-05Por: Dr. Miguel Cardozo, vicepresidente del Instituto de Ingenieros de Minas del PerúNuestro bicentenario lo estamos recibiendo en medio de una aguda crisis política, económica y social.Tenemos un proceso electoral que a todas luces requiere de un prioritario análisis objetivo y justo por parte de los árbitros, y un necesario llamado a la calma por parte de las fuerzas políticas que se encuentran disputando cada uno de nuestros votos.Además, ha quedado demostrado que en este proceso electoral gran parte de los votantes por Castillo solo han buscado evitar la elección de Fujimori; y viceversa; es decir, gran parte de los electores por Fujimori solo han apuntado a bloquear la elección de Castillo.Y en medio de este escenario, continúan las posiciones políticas sobre un cambio de nuestra Constitución, la cual ha permitido en los últimos 30 años abrir nuestros mercados y convertirnos en una potencia mundial en minería, agroexportación, pesca, manufactura, servicios; entre otros.Sobre este último punto, recientemente la encuestadora Datum reveló que el 63% de los encuestados, está a favor de realizar algunos cambios en la Carta Magna; mientras que solo el 20% de los peruanos pide un cambio total.Asimismo, se debe resaltar que el 63% y el 62% de los votantes de Perú Libre y Fuerza Popular, respectivamente, están por el cambio parcial de la Constitución.Otra información que debemos considerar es que el 67% de todos los peruanos encuestados rechaza el control de precios frente a un 29% que lo considera adecuado. ¿Y qué piensan los votantes del señor Castillo? Pues bien, un 65% de ellos está en desacuerdo; nivel muy similar con aquellos compatriotas que eligieron a la señora Fujimori.De igual manera, una propuesta de Perú Libre a lo largo de la campaña ha sido la prohibición de las importaciones, la cual ha recibido un 69% de rechazo frente a un 22% a favor.Claramente, todos estos datos son relevantes para quien asuma la presidencia de nuestro país para el periodo 2021-2026; porque uno de los puntos a favor del Perú, frente a los inversionistas mundiales, ha sido ser una nación democrática, donde se da prioridad a escuchar a todas las voces.Asimismo, debemos continuar siendo una nación madura; en la cual reconocemos que nadie es dueño de la verdad; por ello urge tener e impulsar grandes espacios para alcanzar consensos entre todos los peruanos.